Elegir nuevo material se está volviendo muy complicado
Hace unos días me lancé a buscar qué novedades de material encontraba en internet. No recuerdo muy bien por qué pero decidí comenzar con los putters y la primera marca que visité fue PING. En varias webs encontré referencia a una nueva serie que el fabricante de Karsten había dado a conocer durante el PGA Championship en Whistling Straits vía K.J. Choi y Kenny Perry. Esta nueva línea de putters es algo más oscura que otras ofrecidas por PING y al parecer las sensaciones al puttear son bastante buenas, es decir, que se está hablando mucho y bien de los PING Scottsdale.
No me sorprendió para nada que PING siguiera evolucionando porque siempre ha sido puntera en el mercado de putters. Lo que sí me sorprendió es que en esta nueva serie hubiera 14 modelos distintos, todos con el mismo inserto en la cara y con todas las formas posibles e imaginables, tanto las tradicionales como otras más extravagantes que ofrecen más novedades y prometen aprovechar esta inserción más que ninguna otra. Catorce modelos son bastantes y no hay que pensar mucho para llegar a la conclusión de que entre un Ping Anser de toda la vida y uno con esta nueva inserción no deben de diferenciarse tanto en prestaciones como sí lo hacen en su precio. Todo está dentro de una campaña de marketing que sigue PING y los demás fabricantes pero… ¿Es la correcta?